DICHOSO AQUEL QUE AL DIOS DE JACOB TIENE DE AYUDA
Adonai da vista a los ciegos y ayuda a los necesitados y enfermos en el momento de tribulación.
Marcos 10:52: «Puedes irte, tu fe te ha salvado».
Exodo 23:25: «Ustedes solo servirán YHWH y yo bendeciré tu pan y tu agua y apartaré de ti todas las enfermedades».
Salmo 30:2» Adonai, Elohim mio clamé a ti y tu me sanaste».
El Salmo 146 es un himno en honor a Elohim, es un canto de alabanza y amparo de los afligidos, de todos aquellos que creemos en Dios, que le reverenciamos al que le debemos dar gracias infinitas por los favores recibidos, por los cuidados de nuestras vidas, de nuestros familiares, de nuestros semejantes, de nuestros ojos, de nuestra fe, es un gran fervor al depositar en Elohim nuestro Dios toda nuestra aflicción en los momentos difíciles.
Es solicitar postrado ante Elohim y su divina providencia que nos proteja, que nos cuide cuando realmente le necesitamos y que nos ayude ante una enfermedad, ante un problema.
Salmo 146:1 «Aleluya, alaba al Señor alma mía, mientras viva quiero alabarte y mientras exista elevaré cantos a Elohim No pongas tu fe en el mortal cuya alma se vuelve polvo. Dichoso aquel que al Dios de Jacob tiene de ayuda y pone toda su esperanza en Elohim que es leal y justo, proporciona el pan a los hambrientos, da vista a los ciegos y endereza al encorvado. Elohim ama a los justos y da protección al extranjero, reanima a los peregrinos, sustenta al huérfano y a la viuda, pero trastorna el camino de los malvados. Elohim reina eternamente, tu Dios, Sión de edad en edad Gloria, Aleluya, Bendito Dios».
El Salmo 146 nos otorga a realizar una lista sobre los milagros de Dios y depositar toda nuestra confianza en Elohim quien sana nuestros corazones, su amor por nosotros y su profunda sabiduría no tiene limites. porque el es grande y poderoso. El cumple con nosotros y nos ayuda en todo lo que necesitamos cuando tenemos fe en su dominio y poder. El ayuda a los necesitados y enfermos en momentos de tribulación. Ayuda a sus hijos, a sus escogidos, sus fieles en medio de las dificultades que se nos presenta.
El Salmo 146 nos recuerda como Elohim sacó a su pueblo de Egipto para darle una tierra, así igual nos levanta del infortunio y del dolor, del sufrimiento y de la duda ante el temor de caer, de no encontrar salida, debido a nuestras situaciones morales, sociales y físicas.
Elohim santo, es quien nos cura y nos bendice, y nos protege, por ello este Salmo es de alabanza a los hechos de Dios. Tenemos que darle gracias a Elohim por todo lo que el hace en la tierra.
También nos dice Elohim que lo que mas desea de nosotros es que semos fieles a El y confiemos en su misericordia.
Siracides, dice en el versículo 38-1 llamado las enfermedad y el médico, que al galeno hay que tenerle confianza y estima cuando uno cree en Elohim, porque si uno cree en Elohim el servicio del médico será el servicio de Dios. «Otorga al médico toda la estima que se merece porque así lo quiere el Señor. La mejoría viene del Altísimo y el es el que concede el don de sanar.
Es la forma más perfecta de entender que debemos ESCUCHAR para estar con Dios en el momento de nuestras enfermedades, de nuestras aflicciones porque el buen servicio del médico cuando somos hijos de Elohim viene bendecido por la mano de Dios, y al estar bendecido por Elohim, cualquier asunto por muy delicado, dañino o malo que sea, será resuelto porque Dios ha escuchado nuestra súplica «¡Escucha, Señor, mi oración y atiende mi súplica, por tu fidelidad y tu justicia, respóndeme.»
Alabado seas.
Salmista Elpidio